Como persona no binaria, fue muy empoderante ver el lanzamiento de la nueva política inclusiva de uniformes de la aerolínea Virgin Atlantic de esta semana, en la que se permite al personal llevar el uniforme que prefieran. Pero aún más lo fue darme cuenta del trabajo que se ha hecho entre bambalinas para asegurarse de que esto no quedara solo en una campaña de marketing.
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No es ningún secreto que a la industria del viaje le queda mucho trabajo por delante en materia de igualdad e inclusión. Es un área en la que hago consultorías… muchas consultorías. Existen una concienciación y una comprensión muy bajas respecto a los grupos minoritarios, y hasta hace bastante poco no se consideraba algo prioritario, pero esa tendencia está cambiando.
No hay duda de que los 218 mil millones de dólares en que se valora el mercado del viaje LGTB han ayudado a poner el foco en este asunto, pero va más allá: también hay un cambio de actitud. Un estudio reciente de la Human Rights Campaign apunta a que el 72% de población adulta está de acuerdo con la afirmación “las personas trans deberían tener igualdad de derechos y poder vivir sin violencia ni discriminación”. Si unimos eso a que el 42% de adultos en Estados Unidos conocen de manera personal a alguien de la comunidad trans, vemos que la visibilidad trans va subiendo posiciones en nuestra escala de prioridades.
Virgin Atlantic se ha puesto las pilas en este asunto. La aerolínea ha colaborado con el Diversity Standards Collective para traer representación trans y asegurarse de que la campaña no era algo superficial. Su misión es fantástica: ser la aerolínea más inclusiva de todas las que surcan los cielos.
Por supuesto, para conseguir esto hará falta mucho más que establecer una nueva política inclusiva de uniformes con la que dejar que su personal decida qué ropa usa, pero en este caso sí hay más. La aerolínea estaría enmendando sus políticas de inclusión de personas trans para tomar en consideración asuntos como los permisos para tratamientos médicos relacionados con la transición, vestuarios y duchas inclusivas y dar la opción a los empleados de incluir sus pronombres en la placa identificativa, si así lo desean.
La compañía también ha actualizado su sistema de billetes para permitir que la población viajera con marcadores de género neutro puedan usar el tratamiento Mx [en español sería similar a “señorx”] y seleccionar las opciones No definido/No especificado en el apartado de género cuando reservan un billete. Es un paso en la buena dirección, aunque actualmente algo limitado.
Me encanta la marca Virgin, siempre se han presentado como una empresa LGTB-friendly y este parece un avance acorde con esa filosofía. Lo importante es asegurarse de que las personas con diversidad de género que podrían aprovechar la oportunidad para salir del armario en el trabajo reciben el apoyo que necesiten, en caso de acabar recibiendo una respuesta negativa en su entorno laboral.
Es una situación que me conozco muy bien: cada vez que salgo de casa con un vestido o cualquier prenda que me hace sentir bien acabo siendo el blanco de personas intransigentes con quienes nos salimos de los estereotipos de género.
Las reacciones son muy variadas, desde miraditas no muy disimuladas a susurros, insultos y cosas peores. Siempre digo que elijo mi felicidad antes que mi seguridad, y esta es una realidad para aquellos que nos salimos de los caminos marcados. Sería interesante saber qué medidas ha planteado Virgin para asegurar el bienestar físico y mental de las posibles víctimas de violencia, porque habrá violencia y, si bien cuando aterricen habrá consecuencias, la situación puede volverse mucho más peligrosa en una caja de metal a 30.000 pies de altura.
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Personalmente creo que lo más importante es que esto esté sucediendo: es muy reconfortante ver a una empresa tomar medidas para reconocer tus necesidades y recibir con los brazos abiertos tu individualidad. La verdadera inclusión es aceptar el cambio y crear medidas al respecto.
También es muy relevante señalar que Virgin Atlantic está implantando formaciones obligatorias en inclusión para sus socios del sector del turismo. Dada la discriminación que sigue existiendo contra el colectivo LGTB en el mundo, será interesante ver cómo se desarrolla. Muchas personas, entre las que me incluyo, observaremos con suma atención.
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Chris King (pronombres elle/ella) es CEO de Lighting Travel Recruitment, consultoría de contratación de personal en los sectores del viaje de lujo y el estilo de vida.
Este artículo fue publicado en septiembre de 2022 en Condé Nast Traveller UK. Adaptado y traducido por Virginia Buedo.
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