Bilbao con niños: los mejores planes de la ciudad al monte

No es casualidad que Bilbao esté considerada como una de las ciudades con mejor calidad de vida de España. Y en una ciudad donde se vive bien, hay niños. Por lo tanto, a la pregunta “¿es Bilbao una ciudad para viajar con niños?”, la respuesta es un sí rotundo. Lo demuestran la calidad de sus parques -que los hay prácticamente en cada manzana-, las propuestas culturales, las zonas verdes y la posibilidad de elegir entre costa o monte, ya que todo está accesible, también su gastronomía -adaptada a las familias-, y un clima bastante agradable todo el año.

Si eres un viajero de ciudad, y tus hijos no están acostumbrados a jugar “en la calle”, te sorprenderá Bilbao, porque es una ciudad donde los niños ocupan el espacio público. En plena Plaza Nueva (Plaza Barria) encontrarás, entre bar y bar, un campo de fútbol improvisado, donde los niños patean el balón sin miedo. Obviamente, no solo recomendamos Bilbao para niños por esta razón, hay muchas más. ¡Te lo demostramos!

QUÉ HACER EN LA CIUDAD

La primera parada de este viaje con niños la hacemos en la estrella de Bilbao: el Museo Guggenheim. Desde aquí empezamos una ruta que acabará en el Casco Viejo, aunque tú podrás alargarla hasta donde desees. Es una ruta ideal para hacer a pie con niños de todas las edades, por su accesibilidad la ciudad es ideal para vivirla en familia, ya sea en bici, carrito o patines…

El Museo Guggenheim sí se puede visitar con niños, de hecho es una gran actividad. Desde la entrada ya podremos disfrutar de la visita, con Puppy, la escultura floral en forma de perro creada por Jeff Koons en 1992. Puppy representa un cachorro escocés de la raza West Highland White Terrier que pesa 16 toneladas y está recubierto de 38.000 flores naturales que se reemplazan dos veces al año. Pero esto podría cambiar este 2024, porque desde el Ayuntamiento se estudia la posibilidad de sustituir las flores por cactus y contribuir así al ahorro de agua. Si lo quieres ver con flores, ¡date prisa!

El Puppy nos da la bienvenida al edificio monumental de carácter vanguardista inaugurado en 1997. Su construcción supuso un antes y un después en la ciudad. Esta monumental estructura de acero de más de 50 metros de altura, simboliza la forma de un barco flotando sobre la Ría de Bilbao. En su interior, alberga más de una veintena de galerías donde se pueden ver obras
desde mediados del siglo XX hasta la actualidad. Para las familias ofrecen distintas actividades y propuestas, desde talleres de pintura para bebés hasta laboratorios de arte. En este enlace puedes encontrar la programación infantil.

En las inmediaciones del museo descubriréis una araña de 9 metros de altura, llamada ‘Mamá’, de la artista francesa Louis de Bourgeois, ‘Los Tulipanes coloridos de acero’ ubicados en la terraza exterior del museo, creación también de Jeff Koons y la instalación ‘El gran árbol y el ojo de Anish Kapoor’ compuesta por 76 esferas de acero inoxidable. Así como La Campa de los Ingleses, un gran parque a escasos metros del museo, el Parque de Doña Casilda con un estanque, columpios, carrusel y una pérgola para los días de lluvia; el Museo de Bellas Artes, con más de 7.000 piezas que datan desde el siglo XII hasta la actualidad. Este paseo finaliza en el estadio de fútbol San Mamés, galardonado con la máxima distinción en la categoría de Instalaciones Deportivas y Recreativas en los World Design Awards. En las puertas 19 y 20 encontraréis el Athletic Club Museoa que cuenta con los trofeos y equipaciones de toda la historia del Club.

DEL GUGGENHEIM AL CASCO VIEJO: QUÉ VER

La Ría del Nervión es la que nos sirve de guía para enlazar cada barrio, de punta a punta. El paseo del Arenal cuenta con un parque infantil, que incluye columpios y hasta un rocódromo, además de un kiosko de estilo “art-decó” dónde en ocasiones se celebran conciertos. Esta superficie de 18.000m2 fue un antiguo puerto natural en el siglo XIV. Si os acercáis un domingo os encontraréis con el Mercado de la flores. Si seguís este recorrido os topareis con el Ayuntamiento de Bilbao, la pasarela Zubizuri, puente blanco en euskera, diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava.

En el centro histórico de Bilbao, en el margen derecho de la ría, encontraréis gran parte de su oferta gastronómica tradicional, además de lugares imprescindibles como la biblioteca de Bidebarrieta, el Museo Vasco o la Catedral de Santiago, entre otros. El Casco Viejo es también el lugar para disfrutar del pintxo pote, una de las tradiciones vascas más divertidas. Aunque suele ser los jueves, muchos bares lo ofrecen otros días de la semana y se combinan pintxos con bebidas a precios especiales. El lugar mítico para disfrutarlo es la Plaza Nueva.

No muy lejos de allí, se recomienda una visita al Mercado de la Ribera, que con sus 10.000m2 está considerado como el mercado cubierto más grande de Europa. Es la mejor parada para llenar las mochilas de productos frescos y locales.

Si lo que queremos es teatro, podemos optar por dos grandes clásicos a ambos lados de la ría: el Teatro Arriaga, edificio del siglo XIX de estilo neobarroco que rinde homenaje al compositor y músico bilbaíno Juan Crisóstomo de Arriaga, o bien el Teatro Campos Elíseos, que ofrece actuaciones para los más pequeños de forma habitual. Tanto si optamos por un u otra opción, disfrutaremos en la zona de un ambiente de lo más vivo, con numerosos comercios, cafeterías y bares que siempre están listos para recibir a todo el mundo.

LAS EXCURSIONES

Desde Bilbao podrás hacer mil y una actividades, sobre todo si te gusta la naturaleza. Desde la misma ciudad se puede subir al monte Artxanda en un funicular, lo bonito de este trayecto de ida y vuelta son las vistas panorámicas de Bilbao. La estación se encuentra a 10 minutos a pie del Ayuntamiento, en la plaza del funicular. También puedes tomar un barco para recorrer la ría o hasta incluso en kayak. En este enlace podréis encontrar más información.

Sin duda, no te puedes perder los alrededores de Bilbao. Nuestra recomendación es La Arboleda, un asentamiento minero que se ha convertido en una bonita zona de senderismo. La encontrarás a 17 kilómetros de Bilbao, en el Valle de Trápaga. Este enclave de 135 hectáreas, fue una zona minera donde se extraía hierro. Lo que antes eran minas, en la actualidad son embalses artificiales rodeados de un paisaje verde impresionante. Para acceder a este entorno se recomienda llegar a través del funicular de La Reineta que data del año 1926 y que permite disfrutar de preciosas vistas sobre el Abra de Bilbao, también se puede llegar hasta aquí en coche. Una vez en la Arboleda, nos perdemos por el pueblo para probar uno de sus platos típicos: las alubias pintas. No te puedes perder las de Asador Maite, son todo un espectáculo.

Desde Bilbao, otra de las excursiones para pasar el día, es la visita a Getxo, un pueblo pesquero a tan solo 20 minutos de la ciudad. Es fácil llegar en metro hasta aquí. Una vez en el pueblo podréis disfrutar de su amplísima playa y paseo marítimo. Getxo es una secuencia de paisajes que no olvidaréis: preciosos acantilados y bosques con flora autóctona. Quizá lo que más os llame la atención sean sus palacetes de orígenes burgueses, esto nos da pie a confirmar la riqueza de esta localidad. A la vista está…

No os podéis marchar sin llegar hasta el barrio de Las Arenas donde os encontraréis con el puente colgante de Portugalete, el primer puente colgante de estas características en el mundo (1893). Actualmente está abierto al público y permite cruzar la ría de lado a lado. Si vais a comer por aquí, no os podéis perder las croquetas del bar Itsasbide y la gastronomía de El Embarcadero.

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¿Qué más podéis hacer en Bilbao? Una de las actividades más entrañales es la vista a Alluitz Natura, una granja escuela que empezó como quesería y explotación agrícola -el Idiazabal es el queso de la zona- y, posteriormente se convirtió en una granja escuela donde las ovejas son tratadas con mucho amor y respeto y dónde aprenderéis no solo a preparar queso, sino también a ser pastores por un día. En entorno es ya de por sí un destino, ya que está ubicada en el Parque Natural de Urkiola.

En Izenaduba Basoa, en Mungia, también lo pasaréis bien. Este parque lleno de personajes místicos y fantásticos de la cultura vasca conserva el caserío más antiguo de Euskadi. Si vais con niños, no os lo podéis perder.

DÓNDE DORMIR

Pocos hoteles pueden presumir de tener las mejores vistas del Museo Guggenheim de Bilbao. El Gran Hotel Domine sí, ya que está justo delante. Este hotel de lujo está situado en la emblemática zona artística de Bilbao, rodeado de los museos Guggenheim y Bellas artes, la Torre Iberdrola, el Palacio Euskalduna y a 5 minutos a pie de la zona comercial y de la estación de metro Moyua.

Por la mañana te despertarás con las vistas al museo y al río Nervión, y a continuación, subirás a la séptima planta para disfrutar de uno de los mejores desayunos de Bilbao -que también está abierto a público normal-, desde su terraza podrás tomarte un chocolate con churros o un delicioso bollo de mantequilla, dulce típico de la ciudad. Si prefieres un desayuno continental, también disponen de huevos fritos, revueltos, o unos deliciosos benedict. No faltan zumos naturales, y productos locales como el queso y el pan.

En sus 145 habitaciones y suites con vistas al museo te sentirás como en casa, son espaciosas y cuentan con todo lo necesario para pasar unos días en familia. En hotel, además, dispone de zona Fitness y Spa con cabinas de masaje, para que los padres también puedan relajarse durante el viaje. En cuanto a la parte gastronómica, cuentan con Lé Café, un restaurante a pie de calle con vistas directas al Guggenheim y de un nuevo Lobby Bar con jazz en directo el segundo jueves de cada mes. Además, si tienes dudas sobre tu viaje, el equipo de ayudará a encontrar los mejores planes y restaurantes para hacer en Bilbao.

DÓNDE COMER

En Bilbao se come de vicio, no es de extrañar que la cocina vasca sea una de las mejores del mundo. Es imposible no caer rendido a su gastronomía tradicional: desde el bacalao al pil pil a los pintxos, eso sí, cada vez más sofisticados. Para comerlos hay que dirigirse a la Plaza Nueva, aquí, por supuesto, hay que probar los pintxos de Gure Toki; también a la calle Ledesma, la Plaza de Miguel Unamuno, la calle de la Diputación y el Mercado de la Ribera, donde también se puede comer muy bien. Hay mucho más, ¡toma nota!

• Restaurante Nido (Barroeta Aldamar Kalea, 3): para probar uno de los mejores bacalaos de la ciudad y carne a la parrilla, ideal para compartir en familia. No nos olvidamos de sus croquetas de Idiazabal. Cocina vasca tradicional.
• Islares (Mazarredo Zumarkalea, 65): cocina de estrella Michelin al lado del Guggenheim.
• Demaio Pizza Gourmet (San Frantzisko Kalea, 10): pizzas de estilo napolitano en Bilbao.
• Casa Leotta - Ajuriaguerra (calle Juan Ajuriaguerra Kalea, 14): buena cocina italiana. Se especializan en pizza y pasta.
• Cork (Poza Lizentziatuaren Kalea, 45): perfecto para tomar unos pintxos y vinos por Bilbao.
• Tipula Burguer (Ledesma Musikariaren Kalea, 22): hamburguesas y mucho más en la calle Ledesma y en el Casco Viejo.
• La Brasa Canalla (Elcano K., 24): no olvidaréis sus hamburguesas de pulled pork, elaboradas con carne de cerdo desmechada.
• Margarito (Portuko Markesaren Kalea, 4): restaurante para flexitarianos, veganos y vegetarianos especializado en hamburguesas.
• La Camelia Vegan Bar (Villarías Kalea, 3): la mejor comida vegetariana en Bilbao.
• La Mula de Moscú (Alameda de Recalde, 15): coctelería y bar de picoteo en el centro.
• El Globo (Diputazio Kalea, 8): bar de pintxos por excelencia.
• El Eme (Calle Gral. Concha, 5): desde 1950 preparan los mejores sándwiches y bocadillos (o torres) de la ciudad.
• Cafeterías: Bihotz Café (Arechaga Kalea, 6), El Tilo de Mami Lou (Areatza Kalea, 1) y Cokooncafé (Iparraguirre Kalea, 5).
• Pastelerías imprescindibles para comer los mejores bollos de mantequilla y mucho más: Pastelerías Martina de Zuricalday Bilbao y Pastelería Arrese 1852 (Alameda de Recalde, 24).

Puedes encontrar más información para organizar tu viaje en la web oficial de turismo de Bilbao.

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